A 5 meses del inicio oficial de las obras, GMC Ambiental sigue adelante con sus labores de monitoreo arqueológico en la Línea 6 del Metro de Santiago, específicamente en la estación Lo Errázuriz y el pique Bremen.
Estas actividades forman parte de un esfuerzo continuo para garantizar que cualquier nuevo hallazgo arqueológico sea identificado y manejado adecuadamente durante las excavaciones y movimientos de tierra asociados a la construcción.
Cristian Bravo Ausensi, director de GMC Ambiental, destacó la importancia de esta etapa del proyecto, señalando que, aunque ya no se realizan excavaciones, el monitoreo es crucial. "Estamos en una fase donde nuestras actividades se centran en la supervisión constante de las obras. Esto incluye la vigilancia de las excavaciones necesarias para la ejecución de los piques y la futura estación de Metro Lo Errázuriz", explica.
Las labores de GMC Ambiental, que comenzaron con el inicio de las obras de extensión de la Línea 6 durante los primeros meses de 2024, se han adaptado a las necesidades actuales del proyecto. "Nuestro equipo sigue activo y comprometido con estas tareas de monitoreo, que se prolongarán durante lo que resta del año," añadió Bravo.
Este monitoreo no solo es vital para la preservación del patrimonio arqueológico nacional, sino que también asegura que la construcción del metro se realice de acuerdo con los estándares establecidos, protegiendo cualquier posible hallazgo durante el proceso.
La participación continua de GMC Ambiental en este proyecto es un reflejo de su dedicación y profesionalismo, consolidando su reputación como líder en el ámbito de la arqueología aplicada en proyectos de gran envergadura como la Línea 6 del Metro de Santiago.